Cuando hablamos de elegir una opción para superficies en zonas con alta humedad, como la cocina o el baño, es natural preguntarse si el material resistirá las condiciones del ambiente. Hablando con un experto en diseño de interiores, me comentó que las encimeras de cuarzo tienen una impresionante capacidad para resistir la humedad. Comprendí de inmediato que esto se debe a su composición. A diferencia de materiales naturales como el mármol o el granito, el cuarzo es una piedra compuesta. Esto significa que está formado por cristales de cuarzo triturados y resinas poliméricas, y esta combinación logra una superficie no porosa.
Al descubrir esto, me di cuenta de que las encimeras de cuarzo evitan que el agua o cualquier otra sustancia líquida se filtre a través de su superficie. Esta característica no solo mantiene la encimera en buen estado con poco esfuerzo de mantenimiento, sino que también previene la proliferación de bacterias y moho, algo muy importante en espacios húmedos. Fui a una tienda especializada y noté que elegía siempre modelos muy duraderos. Conversando con el vendedor, supe que normalmente prometen una durabilidad de alrededor de 25 a 50 años si se les da el cuidado adecuado.
Además, el mantenimiento de una encimera cuarzo es sorprendentemente sencillo. No requiere encerados ni sellados constantes como la piedra natural. Un simple paño húmedo y un detergente suave bastan para mantenerla impecable. Esta funcionalidad práctica es una de las razones por las que se estima que un 65% de las personas eligen cuarzo para sus encimeras al renovar sus casas.
Sin embargo, durante mi búsqueda de materiales, me surgió la duda sobre si las resinas en la composición del cuarzo podrían verse afectadas por la humedad o el calor excessivo. La respuesta que conseguí es que, aunque resisten muy bien la humedad, no son inmunes al calor directo. Se recomienda utilizar siempre protectores o posafuentes para evitar daños por calor. Aprendí que no hay gran preocupación por la humedad mientras no se les someta a temperaturas extremas frecuentemente.
Pensé en la experiencia de empresas como Silestone, que llevan años en el mercado y ofrecen encimeras de cuarzo con garantía de hasta 25 años. Me aseguré de comprobar que estas garantías solo se mantienen cuando la encimera es instalada y cuidada adecuadamente, incluidas las condiciones de humedad.
Sin embargo, para aquellos que se aventuren por primera vez en el mundo de las reformas, es crucial tener en cuenta el presupuesto. Las encimeras de cuarzo suelen tener un costo que oscila entre los 300 y 600 euros por metro cuadrado, dependiendo del diseño y la marca. En conclusión, elegir cuarzo no solo es una decisión estilística, sino también una inversión en durabilidad y funcionalidad.